El coraje de Miss Redfield, Ana R. Cañil

Señor, a nosotras nos han enseñado a cuidar de estos niños como si fueran nuestros hijos, a pensar y comportarnos como si formáramos parte de cada familia para la que trabajamos y a guardar las distancias, algo que me temo que usted no sabe o no quiere hacer.

Una fría mañana de 1962, Elsa Redfield llega al palacete de la duquesa de la Peñalara para trabajar como nanny del más pequeño de los nietos de la aristócrata.

Bajo su apariencia austera, competente y serena, Elsa esconde un alma temperamental y sensible. A su pesar, la joven tendrá que involucrarse en los asuntos de la familia Peñalara, que oculta terribles heridas bajo su deslumbrante apariencia.

Y sin ella quererlo, se verá arrebatada por una inesperada pasión..

Elsa avanzó por la biblioteca para marcharse y sintió que su espalda ardía bajo la mirada del conde. Se iba inquieta y contrariada. No se podía permitir esas sensaciones.

Señoras y señores, hoy les mostraré la novela culpable de que yo durmiera 3 horas anoche. Quizá es el libro que me llamaba más la atención de las novedades que ha sacado Espasa este otoño y mi intuición ha acertado otra vez.

Elsa Redfield creció en Jersey junto a su cuñada Beryl Hibbs y la niña que cuidaba esta,Beryl Adams. Estuvieron juntas durante los 5 años de ocupación alemana en la Segunda Guerra Mundial, puesto que Miss Hibbs y Beryl Adams, que estaban de visita cuando se produjo la ocupación, no pudieron volver a su hogar.
La influencia de Beryl Hibbs, que se convirtió en una madre para las niñas, hizo que Elsa adoptara unos valores de seriedad y rigor y, por ello, decidió tomar el mismo camino que Miss Hibbs y dedicarse a ser nanny.

En 1962 Elsa, gracias a la ayuda de su amiga Miss Hibbs, que es nanny de los Martínez-Bordiú, consigue un trabajo en España. Es entonces cuando veremos el personaje de Miss Redfield, la nanny pelirroja y estirada de los Peñalara, adaptarse al nuevo país, donde no entiende las muestras de afecto y cariño, el exceso de confianza entre el personal doméstico y los dueños de la casa o la falta de confidencialidad entre ellos. Las distancias que interpone Elsa empiezan a acortarse a medida que pasa el tiempo con Lily, la duquesa Peñalara, la doncella Genia y la cocinera Basi. También conocerá a Alejo, el Conde Rojo y ahijado de Lily, que siente cierta atracción por la niñera.

Ese es, a groso modo, el argumento de la novela, aunque hay que añadirle cierta dosis de misterio causada por un anillo maldito y unos asesinatos que ocurrieron hace años. También veremos el duelo interno que tiene la nanny; por una parte Miss Redfield quiere guardar las distancias y ser profesional y por otro lado Elsi ve que puede tener una vida diferente a la que tiene Miss Hibbs, que sigue cuidando niños de otros a su avanzada edad.

Elsa estuvo a punto de echarse a los brazos de doña Lily, de abrazarla y de esconder su cara en la bata de raso, pero recordó a tiempo que hacía muchos años  que controlaba esos impulsos: desde que su madre había muerto y Beryl primero,y Norland después, le enseñaron que los sentimientos se deben enterrar en lo más hondo de una misma para que nadie pueda hacerte daño.

El libro me ha sorprendido gratamente. La forma de escribir de la autora es impecable, deliciosa y maravillosa. El libro tiene poco más de 300 páginas y las 100 primeras nos sirven para situarnos en la novela, es decir, que casi no hay acción, pero es que las descripciones son perfectas, precisas y en su justa medida. La narración y los diálogos son propios de la época pero a la vez muy naturales. En fin, magnífica, espero leer más cosas de esta mujer (Ya le tenía echado el ojo a Si a los tres años no he vuelto pero no me había fijado en que era la misma escritora hasta ahora).

Tengo que reconocer que tenía un poco de miedo de encontrarme con una historia de amor empalagosa de estas que salen en las telenovelas, pero ha sido genial, os lo aseguro, tan natural como la vida misma.

Para mi sorpresa, cuando leo los agradecimientos me doy cuenta de que muchos de los personajes son reales. ¡Me quedé a cuadros! Osea, fuera de la familia del generalísimo y los condes y tal no esperaba que los demás personajes fueran reales, así que cuando terminé la novela tuve que indagar un poco por la red (a las 4 de la mañana, sí, eso explica mi humor un tanto susceptible de hoy xD).

En definitiva, leedla. Os aseguro que la pluma de la autora es impecable y la historia exquisita.

Muchas gracias a Espasa por el libro para reseña.