Londres, 1984; Winston Smith decide rebelarse ante un gobierno totalitario que controla uno de los movimientos de sus ciudadanos y castiga incluso a aquellos que delinquen con el pensamiento. Consciente de las terribles consecuencias que pueden acarrear la disidencia, Winston se una a la ambigua Hermandad por mediación del líder O'Brien. Paulatinamente, sin embargo, nuestro protagonista va comprendiendo que ni la Hermandad ni O'Brien son lo que aparentan, y que la rebelión, al cabo, quizá sea un objetivo inalcanzable.
Por su magnífico análisis del poder y de las relaciones y dependencias que crea en los individuos, 1984 es una de las novelas más inquietantes y atractivas de este siglo.
La distopía de Orwell se sitúa en un mundo donde hay 3 estados de poder: Oceanía, Asia Oriental y Eurasia. Concretamente, la historia sucede en Londres, perteneciente a Oceanía, donde todo el poder pertenece al Gran Hermano, que es la personificación del partido Ingsoc. La población de Oceanía se divide en tres sectores: el partido interior-totalmente entregados al Partido, es la élite-, el partido exterior- que trabaja para el partido pero se trataría de una clase media- y los proles-no pertenecen al partido, de hecho es como si no existieran para ellos.
Los miembros del partido interior y exterior son controlados mediante telepantallas (cámaras situadas en las paredes de cada habitación de cada vivienda y lugar público) las 24 horas del día con la finalidad de impedir que nadie esté en contra del partido: no es necesario que se atente contra él, cualquier mueca que refleje que se pueda tener un pensamiento en contra del partido ya es sospechosa y esa persona debe ser "vaporizada".
El partido es perfecto y nunca comete errores. En el momento que algo va peor que anteriormente se eliminan y falsifican todos aquellos documentos que pueden ser prueba de ello y se hace un "lavado de cerebro" a todos los ciudadanos para que crean que con el sistema es imposible empeorar, sino que todo está en una mejora continua.
Nos encontramos en un sistema totalitario donde se intenta controlar a todos los ciudadanos y donde la libertad de expresión no existe.
"Pero también resultó claro que un aumento de bienestar tan extraordinario amenazaba con la destrucción- era ya, en sí mismo, la destrucción- de una sociedad jerárquica. En un mundo en que todos trabajan pocas horas, tuvieran bastante que comer, vivieran en casas cómodas e higiénicas, con cuarto de baño, calefacción y refrigeración, y poseyera cada uno un auto o quizás un aeroplano, habría desaparecido la forma más obvia e hiriente de desigualdad. Si la riqueza llegaba a generalizarse, no serviría para distinguir a nadie. Sin duda, era posible imaginarse una sociedad en que la riqueza, en el sentido de posesiones y lujos personales, fuera equitativamente distribuida mientras que el poder siguiera en manos de una minoría, de una pequeña casta privilegiada. Pero, en la práctica, semejante sociedad no podría conservarse estable, porque si todos disfrutasen por igual del lujo y del ocio, la gran masa de seres humanos, a quienes la pobreza suele imbecilizar, aprenderían muchas cosas y empezarían a pensar por sí mismos; y si empezaban a reflexionar, se darían cuenta más pronto o más tarde que la minoría privilegiada no tenía derecho alguno a imponerse a los demás y acabarían barriéndoles. A la larga, una sociedad jerárquica sólo sería posible basándose en la pobreza y en la ignorancia."
Éste es el fragmento que más me ha marcado de todo el libro. Me hace pensar en nuestro sistema de Gobierno actual. Recortes en sanidad, recortes en educación, subida de impuestos,... Nos están quitando calidad de vida y oportunidades. ¿Recordáis todos aquellos enfermos durmiendo en los pasillos de los hospitales porque no había habitaciones suficientes, cuando en el mismo hospital tal vez haya una o dos plantas totalmente cerradas? ¿Cuanta gente va a dejar de estudiar si la subvención del estado cada vez es menor y el precio de los créditos es más caro? Eso sí, que a todos aquellos políticos no les falte de nada, que lo que reciben en concepto de dietas es mayor al sueldo mínimo anual de cualquier ciudadano español. Y claro, si te intentas reivindicar contra el sistema una amable carga policial te invitará a que no lo hagas, a que no digas lo que piensas, a que no luches por tus derechos.
Bueno, después de mi momento de indignación, os recomiendo que leáis este libro, os hará reflexionar, os hará despertar...
Este tipo de libros no me suelen gustar, pero gracias por la reseña igualmente :)
ResponderEliminarMe alegra que te guste mi próximo sorteo, ya en breves estará activo!
Un besazo!
Es un libro al que le tengo muchas ganas.
ResponderEliminarPD: Buff, menos mal que no cerré las ventanas de mis otros comentarios, ya que tienes puesto el captcha -las molestas letritas- sino sabes quitarlas en mi blog, hice un tutorial dónde explico como quitarlas.
Un saludo!!
Eiii pues muchas gracias!! No sabia ni que lo tenía la verdad y es algo que me parece super molesto cuando lo veo en otros blogs!
EliminarGran, gran libro. Como no va uno a cuestionar su propia realidad a medida que lo va leyendo. Se que en España la están pasando mal, pero desde aquí (el decimotercer mundo) veo los noticieros, leo los blogs... y lamento comunicarles que no tienen idea todo lo que pueden caer aún. Sinceramente espero que la situación se estabilice (no hablemos ya de recuperación) mucho antes de que el problema de desocupación se les encarne como una angustia crónica. Todo el resto es solucionable en mayor o menor medida.
ResponderEliminarSaludos.
Por desgracia aún podemos pasarlo mucho mucho peor, y más si seguimos con un gobierno tan incompetente que no es capaz de gestionar nada...
EliminarPues ahora mismo lo estoy leyendo!! De momento me aburre un poco la rutina del protagonista pero espero que suceda algo :)))
ResponderEliminarmmmh... verás que hay más acción a partir de las últimas páginas de la tercera parte que es más rápida de leer. La segunda parte se hace un poco lenta (no te quiero decir el motivo para no fastidiartela si aún no has llegado). Aún así, yo considero que es un libro para reflexionar sobre el sistema. Ya me dirás qué te ha parecido! ;)
EliminarMe encantó este libro, curiosamente, me hizo recordar cosas que pasan hoy día, quizá no tan duras como las vaporizaciones, pero si un poco de censura y manipulación.
ResponderEliminar¡Me gustan los libros que reseñas!
Exacto, seguimos igual...
Eliminarexcelente libro! y muy bien con la reflexión... cuesta despertar de la comodidad.. Quizás tristemente a algunos cuantas, cueste mas elegir entre ser parte del partido o ser fiel a los principios y valores..
ResponderEliminarEs un libro buenísimo. Muy bien elegido el párrafo que comentas, es uno de los que yo también tengo marcados.
ResponderEliminarA mi también me gustó mucho: "Pero los proles, si pudieran darse cuenta de su propia fuerza, no necesitarían conspirar. [...] Si quisieran podrían destrozar el Partido mañana por la mañana." Me hace pensar en la actualidad, en cómo no nos damos cuenta del poder que realmente tenemos.
Un libro muy distinto pero que también invita a reflexionar sobre el sistema es "Momo", de Michael Ende. Si no lo has leído te lo recomiendo encarecidamente. Es literatura juvenil, que se lee rapidísimo, pero con una historia más allá del mero entretenimiento.
Mel, gracias por tu comment :)
ResponderEliminarAclararte que no es que Momo sea del estilo de 1984, no tienen nada que ver. Simplemente es una historia preciosa que tiene un trasfondo que cuestiona nuestra forma de vivir.
Un saludo!
No lo he leído, pero ya lo tengo, no se, con tu reseña definitivamente lo leo. Yo también me acorde de Momo, aun que si, no tienen nada que ver. Me encanto tu reseña, se me hizo sencilla, muy fácil de comprender y ademas no revelas nada de lo que trata el libro.
ResponderEliminarhttp://estoschicosleen.blogspot.mx/
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