Editorial Debolsillo
781 páginas, 10'95€
Leningrado, 1941: la guerra parece lejana en esta ciudad de antigua grandeza, donde dos hermanas, Tatiana y Dasha Metanov, comparten un minúsculo apartamento con su familia. La vida bajo el gobierno de Stalin es dura, pero las privaciones que les esperan ni siquiera son imaginables: el ejército de Hitler está a punto de invadir su querida patria.
Bajo el terror y la dificultad, se esconden la belleza y la esperanza: Tatiana ha conocido a Alexandr, un joven oficial del Ejército Rojo de misterioso y turbulento pasado. Mientras el ejército alemán y el duro invierno cercan la ciudad, los amantes se ven abocados a un amor imposible que puede desgarrar la familia de Tatiana y ser, para Alexandr, tan destructivo como la guerra. Y, mientras tanto, la corriente de la Historia arrasa a su paso el mundo tal y como ellos lo han conocido y amenaza con cambiarlos para siempre.
No soy muy fan de leer romántica, pero ya sabéis que a mí las novelas de la Segunda Guerra Mundial me encantan y además es un libro que me han recomendado mucho ciertas señoritas de las que me fío, así que al final no pude resistirme a la tentación.
Debo decir que me ha costado un poquito arrancar con la novela. No porque se me haya hecho pesada o no me haya gustado ni nada, pero cuando tienes las expectativas muy altas ya sabéis que esperáis un boom desde el inicio. La verdad es que al empezar la historia Tatiana me ponía un poco de los nervios (estalla la guerra y a ella le parece algo divertido, la mandan a buscar comida y se lo toma con la calma... oghhh ¡La iba a matar!) pero la niña que es al principio va evolucionando a lo largo de esta dura guerra y acaba siendo una mujer luchadora y valiente.
Tatiana es el personaje que más acompañamos y conocemos durante toda la historia y, de verdad, ¡pobre chica! En serio, he odiado muchísimo a su familia (excepto a Pasha y a su abuelo) hasta sentir una rabia y un odio profundo hacia ellos. Y lo más fuerte es que a pesar de todos los malos momentos que le hacen pasar ella es demasiado buena persona y no guarda ni un ápice de rencor hacia ellos.
Pero entre tantas manzanas podridas aparece Alexandr. ¡Oish, Alexandr! He llegado a sentir puro amor por este hombre, en serio. Cada vez que la protege, que la cuida, que la salva... me roba el corazón. Quizá os parezca que es un poco en plan damisela en apuros pero os aseguro que no, Tatiana es una chica fuerte pero es tan buena que en vez de dar la mano da todo el brazo, y en vez de coger el brazo la cogen entera, y Alexandr quiere poner freno a eso. Eso sí, como en la vida real, los chicos perfectos no existen, y hay algo en Alexandr que no me ha gustado nada: hay momentos en los que la situación le supera y se muestra algo violento y agresivo, ¡y no puede ser! Soy consciente de que nunca llegará a ponerle una mano encima a Tatiana (al menos eso espero) pero cuando se pone así no me gusta nada de nada.
A pesar de todo, es increíble el amor que se tienen, hay momentos en los que se me salía el corazón del pecho :)
- Alexandr, ¿por qué no te compras un helado tú también?
- No quiero un helado.
- Entonces, ¿por qué miras el mío con tantas ganas?
- No estoy mirando tu helado.
- ¿No? ¿Quieres probarlo?
- Sí.- Se inclinó para lamer el helado.
- ¿A que está bueno?
- Muy bueno, Tania.
La historia está muy bien narrada y explicada con detalle. Hay momentos en los que pueden pasar páginas y páginas y no sucede nada "relevante" pero aun así no se me ha hecho pesado. Concretamente ha sido a partir de la segunda parte (más o menos por la página 300) cuando me he sentido realmente enganchada al libro, a partir de ese momento las páginas pasaran sin que me diera cuenta.
Es un libro agridulce, lleno de momentos amargos y duros, pero también cargado de amor.
En fin, que podría hablaros durante muchísimo rato sobre esta novela, pero no me gusta enrollarme >,<(y creo que ya lo he hecho) Sólo os diré que si tenéis la oportunidad de conocer a Tatiana, tan inocente, buena y valiente, y a Alexandr, tan...(no tengo palabras, en serio) os aseguro que disfrutaréis de una historia de amor imposible de las que no se olvidan.