Volverán las naranjas, Xisela López

Editorial Espasa

150 páginas, 14'90€

Una historia de amor escrita con mensajes, sujeta al ahorro de caracteres y al abuso de los puntos suspensivos; una historia de amor única, como lo son todas en realidad. En un móvil, aparentemente perdido, alguien encuentra cientos de mensajes en los que una mujer y un hombre, aparentemente desconocidos, escriben con libertad sobre todo lo que les importa o inquieta. Pero ¿queda el mundo virtual tan lejos del mundo real?

Al igual que todas las cosas en esta vida, el amor ha evolucionado. Ya ha quedado atrás el encanto de las cartas de amor escritas a puño y letra y ahora se envían mensajes con las palabras abreviadas mediante mensajes de móvil, redes sociales o correos electrónicos.

Cuando vi que esta novela recogía una historia de amor narrada únicamente a través de SMS me llamó mucho la atención. Por supuesto, me acordé del libro Contra el viento del norte y de la preciosa historia entre Leo y Emma, ya que este libro recoge los correos electrónicos que se mandaban los protagonistas. Aun así, sentía curiosidad por saber cómo se podía desarrollar una historia sólo mediante mensajes de texto, ya que la limitación de caracteres es más reducida.

La verdad es que me ha sorprendido bastante que con tan pocas palabras hayamos podido conocer tanto a los personajes; sólo a través de lo que dicen en unos cuantos SMS podemos crear un perfil psicológico de ambos. Creo que eso tiene bastante mérito al tratarse de una novela donde las descripciones son inexistentes.

Además, no es una simple novela facilona de tonteo mediante mensajes, ya que la trama da un par de giros inesperados que le dan cierta emoción a la historia.

Volverán las naranjas es una lectura breve y ligera que se lee de una sentada. La narración es muy original y esconde más de una sorpresa entre sus páginas. Es como un tentempié literario, ideal para leer entre lecturas más pesadas.

Agradecimientos a Espasa por el ejemplar